La oración con cual comienzo todos los días
/Cada mañana me digo esta oración de Un Curso De Milagros:
"¿Dónde quieres que vaya?
¿Qué quieres que haga?
¿Qué quieres que diga? ¿Y a quién?"
Lo mejor es cuando recuerdo a hacerlo tan pronto que me despierto...Antes de salir de la cama, digo la oración en silencio a mí misma mientras me acurruco un poco más debajo de las sábanas.
Como la oración de San Francisco, esta oración me enfoca en mi propósito. Creo que nuestro propósito en este mundo es querer y que esto se puede manifestar de muchas maneras diferentes. Por ejemplo, una maestra puede querer a través de su enseñanza; un artista puede querer a través de su pintura; y una barista puede querer a través de su servicio. Cuando digo esta oración, pido ser conducida a la mejor situación donde yo pueda ser de servicio. La oración me permite ser receptiva durante mi día. Si he sido conducida a un lugar donde no sé qué hacer o qué decir, me repito la oración en mi mente y casi inmediatamente mi energía cambia, permitiéndome acceder recursos dentro de mí ser que anteriormente estaban bloqueados.
¡Esto no significa que yo no tengo metas o planes para mis días! Quien me conoce bien sabe que es todo lo contrario :) Lo que esta oración hace es guiarme a aquellas actividades que he planeado (y nuevas actividades inesperadas) que serán del mayor bien para el mayor número de personas. Así tomo mis planes y metas con una maravillosa flexibilidad que me permite crear algo más grande de lo que yo podría haber imaginado. La oración es muy poderosa. Se la recomiendo.
Judith